Meditación para sintonizar con Cristales

Meditación para sintonizar con Cristales

Vamos a practicar un ejercicio de meditación, para seguir sintonizando con nuestros amigos Cristales, y a la vez, con otro estado de conciencia.
Para ello necesitamos cuatro Cristales Generadores de unos dos o tres centímetros, y uno, algo más grande, biterminado, todos de Cuarzo Tranasparente.
  Nos sentaremos con las piernas cruzadas, en la posición de Loto o semiloto, o simplemente cruzadas, como nos sea más cómodo.
Lo importante, eso sí, es tener la espalda bien recta. Nos sentaremos orientados de cara al Norte, osea, necesitaremos una pequeña brújula para situarnos. De esta forma, automáticamente, nuestra espalda da al Sur, y nuestro lado izquierdo y derecho, al Oeste y al Este, respectivamente.
Antes de acabar de sentarnos bien, ponemos cada uno de los Cristales en una dirección, con la punta del Cristal mirándonos, a un palmo más o menos de nosotros. El Biterminado lo dejamos enfrente nuestro, preparado.
Ahora, respiramos suave, pero profundamente, unas cuantas veces, y aprovechamos estos momentos de sintonización para decir, mental u oralmente, como queramos, alguna oración de ayuda.
Después de esto, cojemos el Biterminado con las dos manos, y lo situamos -sin soltarlo- en nuestro primer Chakra, entre las piernas, una punta arriba y la otra abajo.
Respiramos profundamente, llevándo la respiración al Cristal. Cada vez que retenemos el aire. el Cristal brilla más y más.
Un par de minutos, y situamos el Cristal en el Plexo Solar, cuatro dedos sobre el ombligo. Y repetimos.
Lo mismo ahora en el corazón, y repetimos en el entrecejo.
Hemos pasado el Cristal por nuestros principales Chakras.
Ahora los situamos justo encima de nuestra cabeza, y al sujetarlo, con los brazos formamos una especie de rombo, con el Cristal enmedio.
Es el símbolo Sagrado de los Cristales.
Teniéndo el Cristal aquí, visualizamos como una luminosa cascada nos baña completamente, a cada respiración, a cada "petición" al fín y al cabo, de esa energía límpia y renovadora. Cuando hayamos sintonizado con esta imagen, bajamos los brazos de nuevo, a nuestro regazo, con el Cristal.
Ahora visualizamos todos los Cristales iluminados.
Los cuatro de las direcciones, mientras brillan, nos envían las energías del Norte, del Este, del Sur y del Oeste, de todas las direcciones, de Arriba y Abajo. Somos Un@ con todo. Ya no hay "yo" y lo demás. Formamos una unidad. Es un estado reconciliador, sobre todo con un@ mism@, ya que nos aporta calidez y protección.
Os aconsejo que, con esta última parte no esteis más de cinco minutos la primera vez, y que con la práctica, lo alargueis....lo que querais!
En esos momentos, más que pedir, es, simplemente, dejarse llevar, y tener paciencia para que lo que nos ha llegado, se "solidifique" y tome Tierra.
Para ello, también existe una variante, que consiste en colocar en el suelo, entre nuestras piernas, un Cristal de Turmalína Negra, Ahumado, u Obsidiana, para que el arraigo de las energías que hemos movido, sean más rápidas.
En general os aconsejo, como en el resto de prácticas, que vayais poco a poco, y sin esperar nada.
Sin expectativas llegareis más lejos, os lo aseguro.